Capturar la esencia de una comunidad huilliche a través de su
cotidianidad y que ésta se vea a sí misma como protagonista en una exposición,
fue el objetivo del proyecto desarrollado por el fotógrafo profesional Mario
Mendoza, quien compartió cerca de tres meses con las 12 familias que componen la
comunidad Antu Wilef de Anchiqueumo, en el norte de San Juan de la
Costa.
La presidenta de la comunidad, Edith Cumián, revela las
suspicacias que generó el proyecto al momento de plantearles a las familias,
sobre todo a los hombres. “Al principio no entendíamos mucho de qué se trataba.
¿Por qué querían sacarnos fotos en nuestras casas o haciendo nuestras cosas? Lo
más difícil fue convencer a los hombres. Es que aquí nunca se hacen cosas como
estas”.
Para Mario Mendoza, desde el punto de vista técnico lo más
interesante fue el juego de luces, tanto dentro como fuera de los hogares y por
otra parte, se dio cuenta cómo las actividades que realizaban diariamente las
familias estaban relacionadas al área productiva. No es casualidad que entre las
imágenes se destaquen la siembra, el arado de la tierra, dar de comer a las
gallinas y los chanchos, o la producción de chicha.
Luego de verse reflejados en las imágenes la percepción de la
comunidad varió sobre su impresión inicial. Ahora –dicen- se sienten más
orgullosos de quienes son y lo que hacen. Sirve además –aseguran- para mantener
viva la memoria de sus antepasados. Precisamente durante la ejecución del
proyecto falleció uno de los integrantes más antiguos de la comunidad, Alberto
Calfulef, quien ocupa un lugar central en la muestra.
Durante la presentación de la exposición, Mendoza agradeció
la colaboración que prestó la comunidad en todo momento, así como al Municipio
de San Juan de la Costa y al Gobierno Regional de Los Lagos, sin quienes este
proyecto no hubiera sido posible, y anunció una posible segunda etapa, en la
cual la comunidad no sólo esté capturada por el lente, sino también del otro
lado de la cámara.