Una
rápida recuperación tuvo una paciente proveniente de la localidad de Pilmaiquén
tras ser diagnosticada con el Síndrome de Guillain-Barré, gracias a la eficaz
intervención médica de los equipos Cardiovascular y Fisiológico de Hospital Río
Negro y Neurocirugía del Hospital Base San José de Osorno, principalmente,
dando cuenta de un buen trabajo de coordinación de la red provincial de salud.
Blanca
Cancino, de 43 años, acudió al Hospital Base San José de Osorno el 22 de
diciembre pasado, tras despertar con una inusual hinchazón y pérdida de
sensibilidad en una de sus manos, lo cual fue replicándose en todo su cuerpo
con el paso de los días, transformándose en una situación preocupante lo que
obligó a sus familiares a concurrir a Urgencias del establecimiento donde quedó
internada.
Luego
del tratamiento brindado en el recinto de salud osornino, Blanca fue derivada
hasta el Hospital de Río Negro para ser tratada en el Programa de
Rehabilitación Física, siendo este conformado por un equipo multidisciplinario,
según explicó la Directora del establecimiento, Muriel Muñoz.
Blanca
Cancino recuperó la movilidad en sus extremidades luego de casi dos meses de
terapia en el Hospital de Río Negro, de cuya atención quedó agradecida.
La
Directora del establecimiento de salud hizo un llamado a los familiares de los
pacientes que hoy en día se atienden en la Unidad de Rehabilitación, que además
recibe usuarios de toda la provincia, muchos de ellos luego de haber sufrido un
accidente cerebrovascular, a que visiten y conozcan las instalaciones porque
según mencionó es la mejor forma de publicitar la atención y eficiencia que los
tratamientos logran en los pacientes.
La
Unidad espera ser reforzada en infraestructura y equipamiento con el proyecto
de mejoramiento del Hospital de Río Negro.
El síndrome de Guillain-Barré es un trastorno poco común que
hace que el sistema inmunológico ataque el sistema nervioso periférico. El
primer síntoma suele ser debilidad o una sensación de hormigueo en las piernas.
La sensación puede extenderse a la parte superior del cuerpo. En casos severos,
el paciente queda casi paralizado, lo que puede poner en riesgo la vida de la
persona.